Consiste en disponer en casa de un aparato portátil para medir la coagulación. Nosotros mismos podemos hacernos el análisis, e incluso ajustar la dosis del SintromⓇ o AldocumarⓇ.
Existen dos variedades:
- Autoanálisis: El paciente o un familiar se realizan en casa el análisis de INR para control del Sintrom. Posteriormente comunican el resultado al hematólogo que es quien ajusta el tratamiento si fuera necesario.
- Autocontrol: Cuando uno hace autocontrol, es el propio paciente el que se pincha el análisis, ve el resultado y toma la decisión que corresponda de ajuste del tratamiento en la mayor parte de las ocasiones. Es el procedimiento óptimo porque el paciente llega a conocerse a sí mismo incluso mejor que el propio médico. Los pacientes que hacen autocontrol consiguen los mejores resultados de control y el menor número de complicaciones del tratamiento anticoagulante.