En el camino hacia la maternidad, muchas mujeres enfrentan retos emocionales y físicos importantes. Uno de los más desgarradores es la pérdida fetal, especialmente cuando ocurre después de las 10 semanas de gestación. En Hemomadrid, nos hemos preguntado: ¿puede la heparina marcar la diferencia en estas situaciones tan difíciles?
Una experiencia que brinda esperanza.
🔴¿Por qué valoramos el antecedente de pérdida fetal de al menos 10 semanas?
Se estima que en abortos recurrentes las anormalidades cromosómicas del embrión ocurren entre un 30-57 % (depende de la edad de la mujer). A mayor número de abortos, menor edad y en especial en pérdidas fetales de más de 10 semanas disminuye mucho dicha probabilidad . La heparina aplicada desde el inicio del embarazo ayuda a mejorar la invasión del trofoblasto (parte importante de la placenta) y con ello disminuye el riesgo de aborto pero no será útil si existe dicha anomalía cromosómica. Por tanto lo esperable es que su eficacia sea mayor en mujeres que sufrieron una muerte fetal de al menos 10 semanas. Es, por ello, una entidad diferente de los abortos recurrentes tempranos.
Por otro lado es un criterio clínico para considerar como síndrome antifosfolipídico obstétrico cuando se asocia a criterios analíticos. En este caso se aplica tratamiento con heparina.
Hemos tenido la oportunidad de analizar de forma retrospectiva nuestra experiencia en los últimos 15 años. Se trata de 253 mujeres que, tras sufrir una muerte fetal, acudieron a nuestra consulta. Estas mujeres recibieron tratamiento con heparina durante su embarazo, y algunas incluso antes de la transferencia embrionaria en los casos de reproducción asistida. Muchas reciben también ácido acetil salicílico a bajas dosis y algunas tratamiento adicional por inmunología.
Las técnicas de reproducción asistida como el diagnóstico genético preimplantacional y la ovodonación disminuyen o eliminan el riesgo de alteración cromosómica. Es obligado precisar si el embarazo se ha conseguido de esta forma.
Nuestra experiencia sugiere que el uso temprano de heparina puede aumentar significativamente las probabilidades de lograr un embarazo a término. De las 253 mujeres que formaron parte del estudio:
- 202 mujeres lograron tener un bebé nacido vivo.
- de las 159 mujeres que no habían recurrido a reproducción asistida antes de su primera consulta, 135 lograron el objetivo: 112 de ellas de manera natural y el resto con técnicas de reproducción asistida.
El análisis incluyó también a distintos grupos según el tipo de trombofilia diagnosticada, las semanas en las que se produjo la pérdida fetal y la edad de la paciente. En todos los casos los resultados sugieren que la heparina ayuda y además optimiza los resultados positivos de los tratamientos de reproducción asistida.
Sabemos que enfrentarse a una pérdida gestacional no es fácil, y encontrar una solución puede parecer una montaña imposible de escalar. Sin embargo, nuestra experiencia aporta un mensaje de esperanza: los avances en medicina y los tratamientos personalizados pueden marcar una gran diferencia.
Para aquellas mujeres que han pasado por una pérdida gestacional y buscan opciones para continuar su camino hacia la maternidad, la heparina podría ser una pieza clave dentro de un enfoque integral.
Si deseas profundizar en los detalles, puedes consultar el póster de nuestra comunicación científica en este ENLACE.
🔴Nuestro compromiso
En Hemomadrid seguimos trabajando para ofrecer alternativas que no solo sean eficaces, sino también respetuosas y humanas. Porque cada historia de maternidad es única, y merece ser escrita con cuidado y dedicación.
Si tienes preguntas o necesitas orientación, nuestro equipo está aquí para escucharte y acompañarte en cada paso del proceso. 💙